Ante mi mensaje de Navidad hubo muchas aprobaciones y también críticas.
Alguien se enojó mucho y salió a darme muchos consejos.
Agradezco toda sugerencia, pero creo se equivoca.
Curiosamente me endilgó el dicho de Fidias: zapatero a tus zapatos, y él, un político, me indicó cómo debía trabajar de obispo. Perdón: zapatero a tus zapatos.
1) Quédese tranquilo el Sr. Diputado, que estoy en comunión con el Papa Francisco. Ahora bien, con respecto al matrimonio natural y a las llamadas uniones homosexuales y el respeto por las personas, con distintas inclinaciones y conductas, él dice lo mismo que he dicho yo. Hay que informarse bien, no hacer lecturas superficiales.
2) Con respecto a la competencia de otras iglesias, también se equivoca. En el anuncio de la verdad del Evangelio, no medimos por competencia y ni por opinión pública, sino por fidelidad a la verdad. O ¿se cree que hablamos por agradar y buscar adeptos? No tengo ningún adepto, ni tampoco los busco.
3) La obligada cita a José Pedro Varela, muestra qué poco aire libre hay en el Uruguay para plantear las cosas. ¿O solamente podemos repetir lo que dijo un señor hace más de 130 años? Su pensamiento, en primer lugar es particular. Además está acotado en el tiempo. ¿No se puede ser un poco más moderno y plantear cosas diferentes? Pues es muy actual en la legislación de muchos países que se cumpla con el derecho a la información, con una razonable información de las religiones. Más aún que se cumpla con el derecho natural de los padres, dándole espacio a la formación religiosa elegida para sus hijos, también en la escuela pública. Y no digamos cosas inexistentes con respecto a la información sobre Jesús y el cristianismo en la enseñanza de conducción pública en el Uruguay: es irrisoria, cuando no flechada en contra.
4) No dije que se 'promovieran' los valores religiosos en la Educación de conducción estatal. Dije que no se impusiera la ignorancia religiosa obligatoria, que no fuera como si no existiera Dios y la dimensión religiosa del ser humano - salvo algunas críticas destructivas que sí se dan - para que las nuevas generaciones tuvieran libertad para elegir.
5) Si mis ideas son obsoletas o no, tampoco me importa. Pero están vivas en muchas partes del mundo más avanzado. Las legislaciones para no sólo despenalizar, sino proclamar como un derecho la mayor matanza de inocentes de la historia abundan actualmente. Son presentes. Pero son terriblemente injustas y deletéreas. No por actuales se vuelven buenas.
Con respecto a los problemas de sectores políticos no opiné y no opino. Sí es verdad que un diario tituló como que mi mensaje iba dirigido contra el partido gobernante. No voy a opinar sobre la libertad del titulador. De verdad el título no se desprende de lo escrito. Entre otras cosas porque lo políticamente correcto, a lo que en algunos puntos se opone mi mensaje, está difundido en diversos partidos.
¡Bienvenida la crítica! Ahora bien, escúchese también otro pensamiento.
Por otra parte, sólo tuve la libertad de anunciar, que el centro de la realidad es JESÚS. Además que ante él hay que poner en el centro lo que importa: nos enseña a que, renunciando a la impiedad y a las pasiones mundanas, vivamos con sensatez, justicia y piedad en el mundo presente. Y en esa piedad incluyo a Dios ¡muy actual! y también real.
En tercer lugar, reclamé que se dejara escuchar más, en la cultura y en la enseñanza a Jesús, el principal personaje y el principal mensaje de la Historia (al que por supuesto otros pueden no considerar así).
Me ocupé bastante de mis zapatos.
¡Feliz y santo 2016! con la luz de la razón y la hiperluz de Jesús.
Alguien se enojó mucho y salió a darme muchos consejos.
Agradezco toda sugerencia, pero creo se equivoca.
Curiosamente me endilgó el dicho de Fidias: zapatero a tus zapatos, y él, un político, me indicó cómo debía trabajar de obispo. Perdón: zapatero a tus zapatos.
1) Quédese tranquilo el Sr. Diputado, que estoy en comunión con el Papa Francisco. Ahora bien, con respecto al matrimonio natural y a las llamadas uniones homosexuales y el respeto por las personas, con distintas inclinaciones y conductas, él dice lo mismo que he dicho yo. Hay que informarse bien, no hacer lecturas superficiales.
2) Con respecto a la competencia de otras iglesias, también se equivoca. En el anuncio de la verdad del Evangelio, no medimos por competencia y ni por opinión pública, sino por fidelidad a la verdad. O ¿se cree que hablamos por agradar y buscar adeptos? No tengo ningún adepto, ni tampoco los busco.
3) La obligada cita a José Pedro Varela, muestra qué poco aire libre hay en el Uruguay para plantear las cosas. ¿O solamente podemos repetir lo que dijo un señor hace más de 130 años? Su pensamiento, en primer lugar es particular. Además está acotado en el tiempo. ¿No se puede ser un poco más moderno y plantear cosas diferentes? Pues es muy actual en la legislación de muchos países que se cumpla con el derecho a la información, con una razonable información de las religiones. Más aún que se cumpla con el derecho natural de los padres, dándole espacio a la formación religiosa elegida para sus hijos, también en la escuela pública. Y no digamos cosas inexistentes con respecto a la información sobre Jesús y el cristianismo en la enseñanza de conducción pública en el Uruguay: es irrisoria, cuando no flechada en contra.
4) No dije que se 'promovieran' los valores religiosos en la Educación de conducción estatal. Dije que no se impusiera la ignorancia religiosa obligatoria, que no fuera como si no existiera Dios y la dimensión religiosa del ser humano - salvo algunas críticas destructivas que sí se dan - para que las nuevas generaciones tuvieran libertad para elegir.
5) Si mis ideas son obsoletas o no, tampoco me importa. Pero están vivas en muchas partes del mundo más avanzado. Las legislaciones para no sólo despenalizar, sino proclamar como un derecho la mayor matanza de inocentes de la historia abundan actualmente. Son presentes. Pero son terriblemente injustas y deletéreas. No por actuales se vuelven buenas.
Con respecto a los problemas de sectores políticos no opiné y no opino. Sí es verdad que un diario tituló como que mi mensaje iba dirigido contra el partido gobernante. No voy a opinar sobre la libertad del titulador. De verdad el título no se desprende de lo escrito. Entre otras cosas porque lo políticamente correcto, a lo que en algunos puntos se opone mi mensaje, está difundido en diversos partidos.
¡Bienvenida la crítica! Ahora bien, escúchese también otro pensamiento.
Por otra parte, sólo tuve la libertad de anunciar, que el centro de la realidad es JESÚS. Además que ante él hay que poner en el centro lo que importa: nos enseña a que, renunciando a la impiedad y a las pasiones mundanas, vivamos con sensatez, justicia y piedad en el mundo presente. Y en esa piedad incluyo a Dios ¡muy actual! y también real.
En tercer lugar, reclamé que se dejara escuchar más, en la cultura y en la enseñanza a Jesús, el principal personaje y el principal mensaje de la Historia (al que por supuesto otros pueden no considerar así).
Me ocupé bastante de mis zapatos.
¡Feliz y santo 2016! con la luz de la razón y la hiperluz de Jesús.
Monseñor:
ResponderEliminarPermítame el atrevimiento de hacer algunos comentarios sobre el pensamiento Vareliano.
Como bien comenta, pareciera que la cita a Varela es obligatoria cada vez que se habla de religión y educación, queriendo hacernos tragar laicismo en empaque de laicidad.
Lo que más me molesta es que los que citan a Varela citan justamente eso: "a Varela" y no al pensamiento de Varela; claramente hay algunos problemas de lógica en esa forma de argumentar.
Claro, citar el pensamiento vareliano requiere tomarse la molestia de leer a Varela...pero si Mahía hubiera leído a Varela, sabría perfectamente que en el La Educación del Pueblo, T1, capítulo 14; describiendo lo que en su opinión es la situación ideal, Varela cita la legislación Holandesa:
"La enseñanza de la religión es abandonada a las diversas confesiones. A este efecto, los locales de escuela estarán a la disposición de los discípulos fuera de las horas de clase. Así, al instructor laico el cuidado de desarrollar la moralidad, los principios religiosos comunes a todas las creencias, los sentimientos de tolerancia y de caridad. A los ministros del culto, la enseñanza de las verdades reveladas, enseñanza en la que el Estado no tiene nada que ver, y que no está inscrita entre las materias obligatorias. Respeto a todos los cultos en el seno de la escuela"
Pareciera que Varela no era tan "vareliano" como nuestros actuales varelianos afirman.
Saludos.-
Hay un hecho histórico que se conoce muy poco, y que a mí me llegó a través del Ing. James Coubrough, descendiente de su protagonista. La reforma vareliana, en un principio, pretendía excluir la enseñanza religiosa de la educación pública. Pero, gracias a la intervención -a la presión- que ejerció sobre el gobierno el Gral. Timoteo Aparicio desde la oposición, en ese momento la reforma sólo incluyó la gratuidad y la obligatoriedad. La laicidad -rápidamente devenida en laicismo- vino a incorporarse recién en 1909. El Sr. Mahía, como canario que es, debería saber que la no inclusión de la laicidad en el proyecto vareliano original se debíó a un canario nacido en Paso Palomeque, analfabeto, pero fiel católico.
EliminarExcelente Monseñor su respuesta al político desinformado e irrespetuoso. Por supuesto menciona s Varela como un msntra pero como dice el clarificador mensaje que le han enviado no conoce el pensamiento de Varela ni s Varela. Olga Godin católica apostólica romana.
ResponderEliminar¡Salve Monseñor Alberto!
ResponderEliminar"Ladran Sancho..."
Les incomoda la Verdad y con mucha falta de delicadeza y sabiduría, hacen mucho ruido y pocas nueces.
¡Al trabajo y adelante!
Muchas gracias
Roberto Mezzera Raggi
ESTO ES PARA EL OBISPO YA QUE NO PUDE ENTRAR EN LA PÁGINA DE DIOĆESIS DE CANELONES.
ResponderEliminarVeo que se siguen haciendo llamados "vocacionales" a chicas y chicos para integrar las huestes de religiosas y religiosos. Pero luego no todas las chicas y chicos que por años van a un noviciado, continúan luego hacia el cúlmen de la consagración. Por el camino quedan entonces, sin una histora laboral y sin ningún aporte por parte de la iglesia al Banco de Previsión Social, a perjucio de sus economías personales. Si bien han existido casos en los que se les ha permitido trabajar afuera de la vida religiosa mientras se preparan, no es así en la mayoría de los casos. ¿Qué me responde usted al respecto de tan terrible injusticia social por parte de la iglesia católica?
¿Cómo piensa la iglesia católica corregir este debe con todos los que pasaron por sus noviciados?
ResponderEliminarCada persona puede pensar como mejor le parezca. En lo personal creo que el personaje de Jesús, del modo conveniente como lo describen quienes los predican en general, es el mejor invento de sometimiento de la raza humana que viene a completar lo que ya opiné del personaje de María como imagen minimizadora del género femenino. Y especialmente la Iglesia Católica, predica que mediante la transustanciación de las especies de pan y de vino, el santísimo, o sea el mismo Jesús, queda en diversidad de lugares presente en sagrarios hechos con ese fin; lo llevan a todos lados de un modo equivalente a "tener a Dios en el bolsillo". Y que Dios según vuestra fe, pues al Dios hecho hombre que se humilló al mango por todos nosotros mostrandonos según ustedes el único camino de la salvación: La humillación completa de la raza humana. De los pobres será según ustedes el reino de los cielos y la vida por acá es relativa. Creo que la idea, muy conveniente para los poderosos, es muy ingenua pero no por ella menos peligrosa. Se trata de que todo el que "crea" se humille, se someta, se empobrezca en detrimento de el y de los suyos y solo crezca una clase alta y poderosa: La de los que inventaron la maravillosa idea....
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